El sábado pasado, en Murcia, falleció a los 86 años el sacerdote diocesano Juan Cortés Férez, dejando un legado significativo en su comunidad y en la diócesis.
Juan Cortés nació el 24 de abril de 1937 en Albudeite y recibió el bautismo en la parroquia de Nuestra Señora de los Remedios de su localidad natal el 26 de diciembre de 1939. Su vocación religiosa se manifestó tempranamente, ingresando a los 13 años en el Seminario Menor San José, donde completó su Bachillerato.
Continuó su formación religiosa en Francia, haciendo el noviciado con los Padres Blancos en Gap y estudiando 2º de Teología en Lovaina, Bélgica. De regreso a la Diócesis, continuó sus estudios de Filosofía y Teología en el Seminario Mayor San Fulgencio. El 8 de junio de 1963, fue ordenado sacerdote en la iglesia de San Bartolomé-Santa María de Murcia, por Mons. Ramón Sanahuja y Marcé, obispo de Cartagena.
A lo largo de su vida sacerdotal, el Padre Juan ocupó varios cargos pastorales en distintas parroquias y localidades de la Diócesis. Comenzó como Coadjutor en las Parroquias Santa María de Gracia de Cartagena y Santiago de Jumilla. Luego, asumió el rol de Cura auxiliar y encargado en las parroquias El Salvador de Jumilla, Nuestra Señora del Rosario de La Alquería y Fuente del Pino en Jumilla, y Nuestra Señora del Carmen en Isla Plana, Cartagena.
Más tarde, fue Cura ecónomo en la Parroquia Nuestra Señora de la Fuensanta en Patiño, Murcia, durante veinte años, desde 1971 hasta 1991. Posteriormente, ejerció como Párroco en La Purísima de Fortuna desde 1991 hasta 2003. A partir de 2003, se convirtió en capellán de la Venerable Congregación del Santísimo Sacramento en el Monasterio de Santa Clara la Real en Murcia y colaborador en la Parroquia Santa María de Gracia de Murcia desde 2004.
El Padre Juan dedicó su vida a servir a Dios y a su comunidad, compartiendo su fe y ofreciendo apoyo espiritual a quienes lo necesitaban. Su compromiso pastoral y su amor por la iglesia fueron evidentes a lo largo de su trayectoria sacerdotal.
Con su partida, la comunidad religiosa y la Diócesis de Murcia lamentan la pérdida de un sacerdote ejemplar, cuya dedicación y servicio han dejado una huella profunda en aquellos a quienes acompañó en su camino de fe. Su legado perdurará en el recuerdo de aquellos que tuvieron la oportunidad de conocer y compartir con él. Descanse en paz, Padre Juan Cortés Férez.
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