La alcaldesa de Cartagena, Noelia Arroyo, ha asistido este martes 17 de mayo a la manifestación que se ha celebrado en Alicante a favor del trasvase Tajo-Segura, en el que se han dado cita agricultores de Alicante, Murcia y Almería para protestar por los recortes previstos en el Plan de cuenca del Tajo.
En el transcurso de la manifestación, Arroyo ha asegurado que “recortar el trasvase es recortar empleo, subir el paro y subir el precio del agua doméstica”, recordando que el trasvase mantiene el 80 por ciento de la agricultura del Campo de Cartagena, 45.000 empleos, además de detener el avance del desierto y proporcionarnos agua para beber.
Para la alcaldesa, la decisión del recorte del trasvase, previsto en unos 105 hectómetros cúbicos, es decir, la tercera parte del volumen medio transferido hasta ahora al Levante, “es una amenaza de muerte contra el Campo de Cartagena, que depende en un 80% del agua del trasvase, y que cuenta con 45.000 empleos directos en toda la zona regable”.
En este sentido, Noelia Arroyo ha hecho alusión a un estudio de la Universidad de Alicante que habla de 15.000 despidos en Almería, Murcia y Alicante y que se pagará el agua un 13 por ciento más cara por la necesidad de desalar más.
La conclusión, según la primera edil, es que la decisión es injusta, “porque quita el agua a los agricultores que mejor uso hacen de ella en España, quita el agua a una zona de España que ha hecho grandes inversiones en ahorro de agua que nadie exige en el Tajo”, por lo que, continuaba Arroyo, ”exigimos que se revise este plan y que no se materialice ya que lo notaremos todos, no solo los agricultores sin todos los habitantes de Cartagena y su comarca”.
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